APRENDER PARA MEJORAR EL MUNDO

El deseo de cualquier educador es ayudar a que sus alumnos sean las mejores personas del mundo. Soñamos con formar seres humanos que sean un don, un bien para la sociedad. Los contenidos, las capacidades, las competencias son solo herramientas; la finalidad que sean felices haciendo felices a los otros.

Y en esta clave, hemos lanzado este curso, un proyecto de Aprendizaje y Servicio para los alumnos de 1º de Bachillerato en la asignatura de Religión. Se trata de una metodología que pretende que el alumno aprenda al mismo tiempo que echa una mano. ¿Qué mejor manera que estudiar la Doctrina Social de la Iglesia y su compromiso que conociendo sobre el terreo entidades que trabajan por ello y pudiendo acercarse a la realidad del voluntariado?

Y hemos buscado cómo. El Guá, proyecto socioeducativo de la Fundación María Auxiliadora, que trabaja con adolescentes del barrio y del colegio, necesitaba voluntarios. ¿Por qué no ayudar mientras conocemos la Fundación y sus objetivos para ver “en vivo” cómo la Iglesia se compromete en lo social? ¿Y por qué no ayudar a compañeros más pequeños en sus estudios? También nuestro colegio es Iglesia y quiere estar al lado de las necesidades de las familias. Y es Iglesia nuestro Centro Juvenil, que educa en el tiempo libre y en la fe; y algunos de nuestros alumnos ya son voluntarios en él; o echar una mano en el Equipo de Pastoral, aportando nuestros gustos y lenguajes para hacer más atractivo y cercano el anuncio del Evangelio.

Durante todo el curso ahí estarán nuestros alumnos de 1º de Bachillerato, conociendo, aprendiendo, sintiéndose útiles. Aprendiendo que el mejor camino para ser es el de acercarse a las necesidades de los demás, el de hacerse personas que desde ya, están mejorando el mundo.

Conchi Muñoz, Coordinadora de Pastoral