El pasado 9 de julio finalizaron las pruebas de la EBAU en Valencia. Ese día también terminó un recorrido de dos años por esa etapa llamada Bachillerato. Son dos cursos especiales, un puente entre la adolescencia de la ESO y la juventud en la Universidad.
Este año más que nunca nuestros alumnos han tenido que luchar contra la adversidad y podemos decir sin dudarlo que lo han superado con Matrícula de Honor. Por desgracia, sólo se puede otorgar ese título a un número muy limitado de personas cada año, en nuestro caso a los cinco mejores expedientes de Bachillerato. Y son precisamente estas alumnas las que han querido contar brevemente su experiencia y daros algún consejo para afrontar esta etapa.
“Cuando entras a bachiller parece que el tiempo se detiene pero realmente son dos años llenos de experiencias. Experiencias buenas y otras no tanto pero ,al fin y al cabo, experiencias de las que siempre vas a poder sacar el lado positivo y un aprendizaje.
En estos dos años he aprendido que el tiempo pasa volando y hay que disfrutar al máximo de cada momento porque hasta lo más insignificante luego se echa de menos.
Siempre con esfuerzo y dedicación llegaréis a vuestra meta y podréis alcanzar todo lo que os propongáis.
Recordad que hay tiempo para todo y cuando veas que gracias a tu esfuerzo has alcanzado la meta, entonces sentirás que ha valido la pena.”
Ainhoa Alonso.
“El bachillerato que yo he vivido en mi colegio ha supuesto una etapa muy bonita y enriquecedora que me ha ayudado a crecer personalmente y a conocerme más a mi misma, y no lo digo por decir. Al mismo tiempo para mí también ha sido la más dura de mi vida estudiantil, o más que dura, intensa. Gente que ha pasado por ello te dice que existe un gran salto desde la ESO y que supone mucho estrés, pero yo considero que eso depende de a lo que aspire la persona o de la manera de verlo de cada uno. En cierto sentido es difícil, pero no sacar nota, sino tener la fuerza mental necesaria como para poder conseguirlo. Y diréis, ¿de dónde la sacas? Pues simplemente me lo autoimpongo como reto y me esfuerzo por demostrar de lo que soy capaz, y sobretodo demostrármelo a mí misma, que es mucho más satisfactorio y te ayuda a valorarte más, lo aseguro. En realidad se trata de eso, de conocerse a uno mismo y saber cuáles son tus puntos fuertes y débiles para actuar en función de ello, o al menos eso es lo que a mí me ha servido.
En fin, creo que bachiller no es ni un «suicidio» ni olvidarse de tener vida social, todo depende del punto de vista del que lo quieras ver y de cómo te adaptes a la situación. Está claro que habrán momentos de presión y nervios a lo largo del curso (eso es inevitable), pero, al fin y al cabo, son sentimientos que probablemente ya hayas experimentado y que muchas veces te habrán intentado explicar cómo sobrellevar, no?
Aprovecho para dar gracias por haber tenido profesores a los que realmente se les ha notado su pasión por su profesión y que realmente se han preocupado por mí y han valorado mi esfuerzo. Esto es algo que a la mayoría nos ayuda muchísimo a motivarnos y a querer aprender de verdad.
Por último, para los que quieran seguir este camino, pensad que por ello hemos pasado muchos estudiantes y que son sólo dos añitos de nada comparado con lo que viene después. De verdad que merece la pena. Mucho ánimo!! “
María Beltrán
“Si algo he aprendido en bachiller es que quien algo quiere algo le cuesta, con ganas y con esfuerzo se llega a las metas.
Algo imprescindible también es tener paciencia y no rendirse a la mínima, es más, las caídas siempre suman en positivo (aunque no lo parezca en el momento) porque te dan más energía para poder lograr tus objetivos.
Bachiller es como una montaña rusa de emociones, parece un mundo de largo pero luego se pasa volando, tendrá sus momentos buenos y son momentos malos pero siempre hay que mirar para delante con positivismo y ganas. Solo me queda decir que disfrutéis de lo que podáis aunque suene un poco loco, porque luego se echan de menos todas esas cosas bonitas de la etapa que quedan en segundo plano siempre. Las cosas llegan con esfuerzo, pero disfrutar y saborear los momentos porque luego no vuelven. Mucha suerte a todos.”
Marta Martínez
“Estos dos años en el colegio han estado llenos de experiencias de todo tipo, unas que nos han dejado recuerdos que nunca olvidaremos o personas que nos acompañarán el resto de nuestra vida y algunas que nos han dado lecciones, más allá del temario. De lo que estamos seguras es que las personas que entraron en bachiller, no son las mismas que han salido: hemos madurado y crecido todos juntos.”
Clara Noé
“Si dentro de unos años me preguntaran por mi colegio estoy convencida de que me acordaría de muchos momentos, muchas amistades y muchas fiestas típicas del cole , pero lo que nunca olvidaré es la confianza que depositaron en nosotros todos y cada uno de los profes que hemos tenido a lo largo de estos años, como nos hacían sentir que lo más importante éramos nosotros y como nuestras preocupaciones eran también las suyas.
Otra cosa imposible de olvidar son todas las salesianas que han estado presentes en todo momento y que nos han cuidado desde que éramos pequeños porque todas ellas son el claro ejemplo de la alegría y el espíritu salesiano.
Me siento muy orgullosa de haber sido parte de algo tan especial pero, ahora que he acabado, tengo un reto por delante y es ser lo que yo quiera ser porque en el cole siempre me enseñaron a perseguir mis sueños, a confiar en mí misma y a disfrutar de los buenos momentos que todavía tengo por vivir.”
Mar Torán
Esperamos que estas palabras os hayan motivado para afrontar con ganas y con ilusión una etapa intensa pero muy gratificante. Sirva también este artículo como reconocimiento al esfuerzo y la constancia de estas cinco alumnas. ¡Enhorabuena! Seguro que vuestros sueños se harán realidad.
Y recordad que el Colegio Salesianas de Valencia siempre será vuestra casa.