Huerto Mamá Margarita, mucho más que un huerto.
En el Colegio María Auxiliadora de Valencia, el proyecto del huerto escolar «Mamá Margarita» no es solo un espacio de cultivo, sino una auténtica aula al aire libre. Inspirado en Margarita Occhiena, la madre de Don Bosco, quien con su huerto ayudó a alimentar a los primeros chicos acogidos por su hijo, este huerto tiene profundas raíces en el carisma salesiano.
Este curso escolar marca un importante avance en el huerto, ya que ha sido reconocido como un Proyecto de Innovación e Investigación Educativa por la Conselleria d’Educació bajo el nombre «Mucho más que un huerto». Y es que, efectivamente, este proyecto pretende ir mucho más allá de cultivar plantas; busca cultivar conciencia ambiental, inclusión y aprendizaje práctico.
Un Espacio de Sostenibilidad y Educación
El proyecto «Mucho más que un huerto» tiene como objetivo principal transformar la zona de entrada del colegio en un aula al aire libre, dedicada a vivir los valores de sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente. Enmarcado dentro del Proyecto Guardianes Verdes y por lo tanto de Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), este nuevo espacio será un lugar donde los alumnos puedan aprender de manera directa sobre el entorno natural, las dinámicas ecológicas y la importancia de cuidar nuestro planeta.
Este espacio educativo no solo servirá para enseñar principios básicos de botánica, sino que será un laboratorio vivo para entender la biodiversidad, el ciclo del agua, la importancia de los polinizadores y el impacto positivo de la agricultura ecológica. Además, se instalará una estación meteorológica, lo que permitirá a los estudiantes seguir el clima en tiempo real, aprender sobre los patrones meteorológicos y su influencia en los cultivos.
Inclusión y Aprendizaje Activo
Uno de los pilares del proyecto es la inclusión. El huerto Mamá Margarita está pensado como un lugar seguro y accesible para los alumnos con necesidades educativas especiales, ofreciendo un espacio de experimentación sensorial. Aquí, podrán interactuar con texturas, olores y colores de la naturaleza, fomentando su desarrollo y permitiendo que todos participen en actividades prácticas.
Además, los alumnos de Programas de Diversificación Curricular (PDC) de la ESO tendrán un papel clave en el mantenimiento del huerto. A través de su participación activa, se fomentarán competencias fundamentales como la responsabilidad, el trabajo en equipo y el compromiso con el entorno. Este aspecto práctico del huerto también permitirá que los alumnos de Infantil se familiaricen con el ciclo de la vida y el origen de los alimentos.
También los alumnos de Bachillerato se van a beneficiar de este espacio. Llevarán a cabo experiencias de estudio del clima, microbiología y botánica.
Movilidad sostenible
El huerto Mamá Margarita no es solo un proyecto educativo, sino también comunitario. Se incluye la ampliación del espacio dedicado a aparcar bicicletas, fomentando el uso de transporte sostenible entre los alumnos y el personal del colegio. De este modo, la entrada al centro se convertirá en un lugar donde convergen la naturaleza y la movilidad sostenible.
Manuel Feases, coordinador del huerto escolar.